viernes, 27 de noviembre de 2009

Cuando mucho es malo


Como en muchas cosas de la vida, todo se rige por unos valores, o cantidades, y si se exceden esos valores, empieza a ser malo.
En la comida, comer chocolate está bien, pero comerlo en exceso es malo, lo mismo con los dulces, un poco está bien, pero demasiado, pues tiene efectos contra la salud a largo plazo.
En el deporte pasa también algo parecido, hacer ejercicio está bien, mejora la salud y demás, pero hacerlo en exceso, te lleva a cansancio excesivo, y demás problemas derivados.
Pero todo esto no solo se deja ver en este tipo de cosas, también en la forma de ser, sin ir más lejos, el caso que quería exponer, el ser buena persona.
Parece increíble, pero es cierto, es algo que he llegado a observar después de mucho tiempo, y es que no se puede ser muy buena persona. Ser buena persona esta bien, ayudas a los demás, te preocupas, y todas esas cosas, pero siempre habrá alguien que lo vea con malos ojos, la envidia es muy mala, y los que lo ven bien que seas bueno, pues llega un momento en que se aprovechan de ello, te piden más y más, por que saben que no puedes decir que no a un amigo, hasta cierto punto, la gente no es tan tonta como para pedir dinero o cosas así, pero si del tipo llévame a tal sitio cuando no te pilla de paso o que no estaba previsto, ayúdame a tal cosa, incluso a extremos de no ayudar, si no de hazlo tu, que yo no puedo, y ya no empiezas a ser bueno, has pasado a ser gilipollas.
Así que mi conclusión es que en esta vida tiene que haber un equilibrio para todo, así que uno debe ser bueno, pero también un poco cabrón.

1 comentario:

  1. Si es que uno de bueno es tonto que se suele decir!!! jajaja

    tio, tenemos que aprender a ser malotes! jaja

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